La carne al ajillo receta de la abuela es un plato clásico que evoca recuerdos de hogar y tradición. Este plato, lleno de sabor y aromas reconfortantes, es una delicia que se ha transmitido de generación en generación, y hoy te invitamos a descubrir cómo prepararlo de la manera más auténtica.
Ingredientes para la carne al ajillo
La clave para una carne al ajillo perfecta radica en la selección de ingredientes frescos y de calidad. Aquí te dejamos la lista de lo que necesitarás:
Para la carne:
- 500g de carne de cerdo o ternera en trozos
- 4 dientes de ajo
- 1 cucharadita de pimentón dulce
- Sal y pimienta al gusto
Para la salsa:
- 100ml de vino blanco
- 2 hojas de laurel
- Aceite de oliva virgen extra
- Caldo de carne
Pasos para la preparación
La magia de la carne al ajillo está en su proceso de cocción lento que permite que los sabores se mezclen y se intensifiquen. Sigue estos pasos para lograr una carne irresistible:
Marinado de la carne:
Antes de cocinar la carne, es fundamental marinarla para que absorba todos los sabores. En un bol, mezcla los trozos de carne con los ajos picados, el pimentón, la sal y la pimienta. Deja reposar durante al menos una hora en el refrigerador.
Dorar la carne:
En una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva y añade la carne marinada. Dórala por todos los lados hasta que esté bien sellada y tome un color dorado. Retira la carne de la sartén y reserva.
Elaboración de la salsa:
En la misma sartén, añade un poco más de aceite de oliva y sofríe los ajos picados. Cuando estén dorados, incorpora el vino blanco y deja que se evapore el alcohol. Agrega las hojas de laurel y un poco de caldo de carne, y vuelve a poner la carne en la sartén.
Cocción lenta:
Una vez que la salsa esté lista, baja el fuego y deja cocinar la carne a fuego lento durante al menos una hora. Es importante que la carne se cocine de manera suave para que quede tierna y jugosa. Revuelve de vez en cuando y agrega más caldo si es necesario.
Consejos adicionales
Para darle un toque extra de sabor a tu carne al ajillo, puedes añadir un poco de vino blanco junto con el caldo de carne. Esto realzará los sabores y le dará un gusto único al plato. No olvides acompañar tu carne al ajillo con unas patatas fritas o arroz blanco para disfrutar al máximo de esta deliciosa receta.
¿Cómo servir la carne al ajillo?
La carne al ajillo es un plato que se disfruta más cuando se sirve bien caliente. Puedes presentarla en una fuente decorativa, acompañada de la salsa y unas ramitas de perejil fresco para darle un toque de color. ¡Seguro que tus comensales quedarán encantados!
¿Puedo utilizar otro tipo de carne para esta receta?
Sí, puedes experimentar con diferentes tipos de carne como pollo o cordero para darle un giro a esta receta tradicional. Solo asegúrate de ajustar los tiempos de cocción según la carne que elijas.
¿Se puede preparar la carne al ajillo con anticipación?
¡Claro que sí! La carne al ajillo suele estar aún más deliciosa al día siguiente, ya que los sabores tienen tiempo de fusionarse. Simplemente guárdala en un recipiente hermético en el refrigerador y caliéntala antes de servir.
¿Qué vino recomiendas para esta receta?
Para esta receta, te recomendamos utilizar un vino blanco seco que no sea demasiado aromático, para no opacar los sabores de la carne y el ajo. Un buen vino blanco de cocina será perfecto para esta preparación.